Los conejos hambrientos
Angustia, superación de temores, valentía, compromiso, lucha por la supervivencia.... Una nueva y trepidante aventura con final agridulce. Un cuento con enseñanzas teológicas y de profundas implicaciones éticas de carácter estoico. Y todo aquí, fabor (gratis), en Casabarata 90000 versión castiza.
Los conejos hambrientos
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Atención!: Versión por corregir.
El trueno rugía, el relámpago centelleaba y la lluvia caía en abundancia.
Se escondía la coneja con sus conejillos en la madriguera.
Pasaron largo rato en esta situación, y a los conejos les entró una gran hambruna. Empezaron a roer todo lo que encontraron en la madriguera.
El conejo más pequeño "Nejillo" se dirigió a la madre diciendo: Mamá nos vamos a marchitar de hambre con la barriga en este estado. Ve a buscar algo para comer, porfi.
Respondió la madre: ¿En dónde voy yo a encontrar comida para vosotros con este frío que pela?
Dijo uno de los conejos: Antes he visto zanahorias tiernas en el huerto vecino, arranca unas cuantas para nosotros.
La coneja se lo pensó un instante y salió pitando a buscar jalo.
Pasó una hora. Y volvió la coneja a la madriguera, llevando una zanahoria nada más. XXXXXXXXXX el conejo pequeño y dijo: Esta zanahoria es pequña y no nos saciará. Y respondió la madre: Di el nombre de Dios, conejo, y come con tus hermanos hasta que te hartes, si Dios quiere.
Notas de estudi:
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